![]()
No he recibido mejor noticia en los últimos meses sino saber acerca de la próxima visita de Anathema a nuestro país, la cual incluye fechas en Monterrey, Guadalajara y Ciudad de México; 3, 4 y 5 de agosto de este año, respectivamente. Se trata, sin duda, de una cita esperada con un grupo tengo en un pedestal muy alto, pese a no dedicarse últimamente a ponerle muchos decibeles a lo que hacen.
Es música inteligente. Incluyente y delimitante al mismo tiempo, por naturaleza. Es un deleite, un viaje exacto al infinito y sin retorno. Es toda una experiencia.
Los hermanos Cavanagh se han preocupado por no ocuparse en las voces que provienen del exterior y se han enfocado en darle vida a un sonido único, más allá de cualquier clase de críticas. Y se han visto, en el camino, tan versátiles como su propio genio se los ha permitido. La producción A Sort of Homecoming, grabada en la catedral de Liverpool (de donde son originarios) es el punto exacto de la madurez de la banda.
El concierto de 2015 es inmejorable. Épico en un sentido de grandilocuencia, porque quizás la única batalla que se libra al verlo / escucharlo es la de no perder el suelo; no volar.
Anathema prepara para este 2017 su nueva producción de larga duración, titulada The Optimist, y la cual saldrá a la venta el 9 de junio. De ahí se desprende Springfield, un tema calmado. Casi a nivel de mar. Excesivamente calmado. Pero para cuando llegue la fecha de presenciar su show en nuestro país, el disco ya habrá conocido el mundo y ahí podremos ver de viva voz de qué se trata.
No hace mucho tiempo que Anathema se presentó en la capital del país junto a Paradise Lost, otra banda exquisita. Sin embargo, la cercanía territorial en este 2017 es una invitación irresistible al encuentro con la música que tanto nos apasiona. Ya luego vendrá Paradise Lost de nuevo para juzgar a vivos y muertos y su reino no tendrá fin.
En la Comarca no hay muchas noticias, aparentemente. Se viene el Clandestine Fest para finales de este mes, con presentaciones estelares de bandas que en muchos casos representan lo mejor de la escena nacional 'underground'. Y pues ahí está, para quien guste, este sábado 29 de abril en un salón sobre la avenida Matamoros, a una cuadra de la Plaza Mayor, en Torreón.
Mientras tanto, vamos trabajando en lo que será el Dihablo Fest IV. Vayan pensando cuáles grupos quieren tener sobre el escenario y manden sus sugerencias a través de los canales abiertos a la comunicación. Veremos que nos deparan los astros.
Lo que escucho en este momento: Sorceress (Opeth) y Emperor of Sand (Mastodon). Este último, disco de este año, entra en la categoría de "gustos culposos", tras las polémicas declaraciones de su guitarrista Brent Hinds sobre el 'metal god' Rob Halford y porqué en verdad creo que Mastodon lo último que toca es metal. Su reciente sencillo Show Yourself es "asqueroso", según la descripción que pudieron compartirme en fechas recientes voces del más allá. Y sí, está fea, pero tiene un estribillo pegajoso. Un no sé qué. Un gusto culposo, pues.
Estamos en Semana Santa, los días en que los creyentes celebran la fe de la resurrección y la vida eterna. Para los que no, sigamos escuchando La Música del Dihablo [Facebook] / @Foko_54 [Twitter]. ¡Nos vemos en el infierno!