Especial
EL SIGLO DE TORREóN
En junio de 2013, un DJ de radio David Mueller de Estados Unidos asistió a un concierto de Taylor Swift junto con su novia, Shannon Melcher y éste fue el principio del fin de su carrera.Mueller pasó al backstage del show esa noche, se tomó una fotografía con la cantante, y terminó siendo echado por la seguridad del lugar luego de que la cantante denunciara que le había levantado la falda y le había tocado uno de sus glúteos. La producción de la cantante denunció este hecho ante la dirección de la estación KYGO, para la cual trabajaba Mueller, y el hombre fue despedido.
Tiempo después, David denunció a la cantante por incriminarlo falsamente y haber arruinado su carrera pero, recientemente, el portal TMZ.com publicó una foto que demostraría que la cantante tenía razón.
Taylor reveló su sentir tras el tocamiento.
"Tan pronto como pudo, me agarró el trasero y me quedé en shock. Parada. Apenas fui capaz de decir: "Gracias por venir", que es lo que le digo a todo el mundo", ha confesado la joven.
"Él extendió la mano debajo de mi falda y me agarró mi glúteo derecho cuando estaba posando para una foto. Parecía que era intencionadamente y que estaba esperando el momento idóneo para hacerlo".